Hasta hace un año yo podía decir que tenía mi futuro asegurado. Estaba en una empresa grande, ya tenía varios años dentro, escalé en varios puestos y la vida me pintaba de maravilla, sin embargo, un recorte de personal me dejó fuera de la jugada.
Deudas, renta, mantenimiento del departamento, gasolina, ¿cómo iba a poder con tantos gastos si no tenía trabajo?
Me puse a buscar empleo y así, a mis 32 años, no encontré nada. Ni mi experiencia, ni mis posgrados me hallaron un empleo y eso acabó con toda mi autoestima.
Estaba yo hundido en mi depresión por desempleo, cuando una amiga de la infancia me buscó por teléfono y me contó de una empresa de distribución de zapatos que me iba a cambiar la vida.
La verdad nunca creí en eso de las ventas por catálogo, pero llegar a Impuls fue otra vez empezar a confiar en mí mismo y en que iba a poder salir adelante.
Impuls es una empresa 100% mexicana, con más de 40 años en el mercado y cuya tirada es que miles de mexicanos se afilien y vendan los zapatos entre conocidos y familiares, de manera que se generen un ingreso continuo, sin cumplir con horarios, requisitos o topes de venta.
Y así fue como entré a Impuls, empecé a vender y ahora gano más dinero que en el empleo anterior, pero sin estar metido en una oficina todo el día. Inclusive ahora tengo oportunidad para ir al gimnasio y estoy aprendiendo otras cosas, al mismo tiempo que vendo con mis compañeros, en el camión y a donde quiera que voy.
Hace un año no hubiera creído que podía hacer dinero sin tener un trabajo formal, pero hoy no me arrepiento de nada y agradezco haber llegado a Impuls.